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- 10 sept 2020
- 2 Min. de lectura

Convento de las Carmelitas

Actualizado: 9 oct 2020

Este convento, construido hace aproximadamente 50 años, es un ejemplo de la riqueza del legado arquitectónico del arquitecto Thomas S. Marvel, FAIA y un ejemplo de cómo podemos preservar efectivamente nuestro patrimonio edificado.

En esta edición les presentamos el Convento de las Carmelitas, una de las obras mas icónicas del arquitecto Thomas S. Marvel, FAIA. Este convento, construido hace aproximadamente 50 años, es un ejemplo de la riqueza de su legado arquitectónico y un ejemplo de cómo podemos preservar efectivamente nuestro patrimonio edificado.

La preservación de esta joya arquitectónica ha sido posible, y sigue siendo posible, por la ayuda de muchos. Entre ellos quisiéramos reconocer los siguientes colaboradores:

Ingeniero Jorge Lázaro León y Ricardo Lázaro León (ambos hijos de quien fue el contratista original de la obra).
Air Master - Sr. Nicolás Megwinoff e Ing. Heidy Velázquez,
Ingeniero Enrique Blanco
Marvel Marchand Arquitectos

Le agradecemos a la fotógrafa Paola Quevedo por colaborar con nosotros en esta iniciativa y por compartirnos las excelentes fotos que tomó del Convento. Pueden seguir a Paola Quevedo por INSTAGRAM - @_pquevedos o visitar su PAGINA WEB.

También agradecemos la colaboración y el apoyo de Sor Ines, la familia Marvel Fuller,el arquitecto José R. Marchand Sifre AIA, y el equipo de Marvel Marchand Architectos.

Sobre el edificio

Las carmelitas tienen una larga historia en Puerto Rico. Originalmente vivieron en el Viejo San Juan, luego en San Germán y más tarde en Santurce, donde se localiza el condominio Las Carmelitas hoy en dia. Cuando el crecimiento de la ciudad y los edificios altos amenazaron su privacidad, compraron un terreno en la cima de una colina, en lo que era entonces un área rural de Trujillo Alto, que aseguraría un ambiente tranquilo para su vida de clausura.

El convento, diseñado para una comunidad de cincuenta y dos monjas, tiene un fuerte volumen horizontal que descansa sobre la colina y tres elementos verticales: el campanario de la capilla y dos tanques de agua que se elevan desde el patio central. Tiene tres niveles con funciones diferentes. El más bajo alberga la cocina y el comedor, la lavandería, el área de trabajo, el coro y la iglesia; el segundo nivel, las áreas académicas, docentes y administrativas; y el tercero y más privado, las áreas de dormir.

La vida austera de las monjas se expresa en los materiales básicos de construcción. El hormigón expuesto se utilizó en todo el complejo y la madera se usó en los pasamanos y los armarios.

Datos del proyecto: